Clausura de la exposición “Cristo, primer revolucionario del mundo”

Con total éxito culminó la exposición “Cristo, primer revolucionario del mundo” del artista plástico uruguayo Hovsep Yanekian, inaugurada el pasado 10 de julio de 2023 en la sala 1 del Museo de Arte Contemporáneo Mario Abreu (MACMA) de Maracay.

El artista presentó al público aragüeño una muestra de su colección privada en la que rinde “tributo al máximo cultor de Venezuela, Hugo Rafael Chávez Frías”. Yanekian destacó que, aunque la muestra en homenaje a Hugo Chávez trata sobre Jesucristo, no la presentó desde la perspectiva religiosa, sino desde del carácter revolucionario que tenía el líder bolivariano.

Afirma que la expresión “Cristo revolucionario” la escuchó de Chávez y la idea fue adquiriendo forma en su mente hasta que fue impulsado a crear esta obra pictórica, utilizando para ello elementos básicos como el óleo, la tela, piezas electrónicas, cruces y otros como “alambres de cobre, viruta de bronce, cobre y acero que se encuentra en los tornos, bobinas, resistencias, tuercas y arandelas que como puedes ver están en todas las obras presentes en esta exposición”.  En general las obras representan la crucifixión con elementos del arte. Agregó que esta propuesta es también un mensaje a la humanidad en cuanto a ayudar a la preservación del medio ambiente mediante la reutilización de materiales y elementos más allá del propósito original para el cual fueron creados.

La muestra adornó los espacios del MACMA durante un mes y luego se trasladará a tierras carabobeñas, antes fue presentada en la ciudad de Caracas donde recogió buenas críticas por parte del público amante de este tipo de arte vanguardista y de contenido revolucionario.

 

Hovsep Yanekian nació en Montevideo, Uruguay, en 1955 y tiene 40 años en Venezuela. Al estado Aragua llegó en enero de 1983, donde ha hecho vida luego de migrar de Uruguay. Sin embargo, su familia es originaria de Armenia, una antigua república soviética, de la que sus padres huyeron en 1915 de la masacre turca. Actualmente, reside en Turmero, estado Aragua.

Según sus propias palabras se considera autodidacta de la pintura, en la cual se inició desde niño.  Estudió ingeniería eléctrica y de este oficio gana el sustento diario. Su sensibilidad artística está en plasmar la vida misma, lo cotidiano y sobre lo que ocurre en el mundo, utilizando su obra pictórica como pretexto y punto de encuentro, haciendo converger espiritualidad, cultura, revolución y medio ambiente, a través de la reutilización de materiales reciclados. Concibe el arte como una forma de liberación. "Me importa que cuando veas el cuadro veas mi mensaje", dice el artista plástico. Cuenta que parte de lo que crea lo ha vendido, pero su interés está en divulgar un mensaje concienzudo a través de su arte utilitario sin caer en la usura.

Texto: Argenis Díaz.

Fotos cortesía de María Eugenia Giusseppi. 

Hovsep Yanekiany su obra pictórica.

 

Hovsep Yanekian frente a su obra.